Quiero esconderme bajo tu ala
Quiero esconderme bajo tu ala, má
Quiero estar cerquita de tu teta
Quiero que me mires mientras me duermo
refugiarme en las cobijas pesadas
siempre tibias
que me tranquilizaban en la infancia
ya no quiero salir.
Soy frágil en este mundo bárbaro
y mis poemas apenas
si alcanzan
No sé golpear
ni amar la avaricia
No aprendí a ser dueño
ni alabar al gerente
No sé vender-me
ni ignorar
callar
pisar
vengar
desconectar
ni olvidarme de mí
Soy capaz de unas cuantas mentiras
un listado suficiente de insultos
cuentos como cachetadas
pensamientos rápidos
y mi estatura me protege un poco.
Pero la dignidad se me agota en la lucha
Protégeme del mundo
protégeme, por favor,
porque me estoy ahogando
hace daño
Duele
y no sé cómo vivir.
No quiero ver
pero veo.
Veo la condena que hemos construido
veo las sonrisas de los dinosaurios
las oraciones que huelen a plomo
siento las uñas clavándose en mis pulmones
escucho, también, a mi corazón endurecerse
Veo
y no quiero ver lo que veo.
Miénteme
Dime que la vida va a estar bien
que voy a aprender a caminar
que el aire no me mata
que la esperanza no es idiotez
que algún día voy a tener un país
un mundo
alguna pequeña posibilidad de no ser agredido
de no convertirme en objeto
de poder sonreír al montarme en un bus
Quítame los nudos de la cabeza
Lámeme la espalda
Límpiame las úlceras
Cánteme la mamita luna
Dame algún futuro (aunque sea ficción)
Sálvame del presente:
no quiero yo, también,
en esta mañana
convertirme en un cabrón.
Quiero esconderme bajo tu ala, má
Quiero estar cerquita de tu teta
Quiero que me mires mientras me duermo
refugiarme en las cobijas pesadas
siempre tibias
que me tranquilizaban en la infancia
ya no quiero salir.
Soy frágil en este mundo bárbaro
y mis poemas apenas
si alcanzan
No sé golpear
ni amar la avaricia
No aprendí a ser dueño
ni alabar al gerente
No sé vender-me
ni ignorar
callar
pisar
vengar
desconectar
ni olvidarme de mí
Soy capaz de unas cuantas mentiras
un listado suficiente de insultos
cuentos como cachetadas
pensamientos rápidos
y mi estatura me protege un poco.
Pero la dignidad se me agota en la lucha
Protégeme del mundo
protégeme, por favor,
porque me estoy ahogando
hace daño
Duele
y no sé cómo vivir.
No quiero ver
pero veo.
Veo la condena que hemos construido
veo las sonrisas de los dinosaurios
las oraciones que huelen a plomo
siento las uñas clavándose en mis pulmones
escucho, también, a mi corazón endurecerse
Veo
y no quiero ver lo que veo.
Miénteme
Dime que la vida va a estar bien
que voy a aprender a caminar
que el aire no me mata
que la esperanza no es idiotez
que algún día voy a tener un país
un mundo
alguna pequeña posibilidad de no ser agredido
de no convertirme en objeto
de poder sonreír al montarme en un bus
Quítame los nudos de la cabeza
Lámeme la espalda
Límpiame las úlceras
Cánteme la mamita luna
Dame algún futuro (aunque sea ficción)
Sálvame del presente:
no quiero yo, también,
en esta mañana
convertirme en un cabrón.
José Miguel Nieto Olivar
4 comentarios:
Querido Nieto:
Que bueno ver tu talento para las letras ordenado en rítmicos versos.
La batería parece habersete tornado en tinta. Felicitaciones, poeta.
la tercera elegía del duino, de Rilke, suena en un sentido similar pero quizá desde una perspectiva combativa. Bacano de verdad, gracias.
hola, acabo de leer el mensaje de rerenvio, la verdad no le habia puesto atención, pero ahora me doy cuenta que detrás hay una voz que quiere decir muchas cosas, se nota la ideología..... espero poder seguir leyendo y saber mas del proyecto editorial.
Querido Joshe
Fue muy grato volver a leer un escrito tuyo y más un poema. Ojalá pudieras ver el mundo a traves de mis ojos y verlo tan rosa que te marees pero alcances a ver la luz de la esperanza. Sin embargo, esto no es posible y mis oraciones no te valen de nada. Asi que solo quiero que sepas que me alegra que sigas escribiendo y que estoy feliz en tierras lejanas. Cuidame a mi primo-hermano y no me lleves al abismo. Un abrazo
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